Ya nos apetece ponernos colores vivos porque el verano está a la vuelta de la esquina. A mi me tiene obsesionada, como todas las primaveras, la combinación de rosas y naranjas. El color es poderoso y tiene un acceso especial a las partes de nuestro cerebro que se preocupan por lo que otras personas piensan y cómo nos sentimos. Las preferencias de color están ligadas en gran medida a nuestras experiencias asociadas con esos colores, así que aún tengo que investigar sobre esto.
Os muestro un pequeño ejemplo, los pendientes San Francisco. Estos son precisamente rosas y naranjas, pero los hago en varios colores diferentes y refrescantes. Ya os los iré mostrando.
Sobre unos aros de plata (también con baño de oro 18k) se mueven pequeños discos y bolas de vidrio Murano de diferentes colores. Son muy atractivos, no pesan nada!!
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